Bechamel vegana de cobertura
Tenía pendiente de preparar esta bechamel vegana casera. Os cuento.
He hecho muchos platos con bechamel, y aunque siempre os cuento como la hago, será mucho más fácil para vosotros poder tener la receta para poder cocinar cualquier plato con bechamel que os apetezca.
Esta bechamel está hecha con aceite de oliva virgen extra, que le da un toque especial, aunque también puedes hacerla con margarina vegana.
La leche que he elegido es leche de avena, pero por supuesto también podéis sustituir por cualquier otro tipo de bebida vegetal, aunque eso si, preferiblemente sin azúcar, ya que si le ponéis bebida vegetal azucarada, la bechamel quedará dulce y una que ya lo ha probado, os recomienda firmemente que la leche sea sin endulzar.
El tiempo de ebullición, serán unos 6-7 minutos más o menos. Los tiempos pueden variar en función de varias cosas, como el tipo de fuego que uséis, si es vitrocerámica, gas o eléctrico, el tipo de harina que pongáis y la olla que uséis. Intentad que sea una que no se pegue, por si acaso…
Si cuando terminas la bechamel, ves que quedan grumos…. No te preocupes, ¡¡truco!!, puedes batirla con una batidora de mano, aunque si sigues los pasos correctamente, no necesitarás una batidora para nada.
Esta bechamel es perfecta para canelones, pasta o cualquier plato que queráis hornear, pues le da la consistencia perfecta que hará del plato, algo especial.
Al no quedar demasiado líquida, cogerá forma en el horno. No obstante, si lo que buscas es una bechamel más líquida, simplemente añade 100 ml extra de bebida de soja, o lo que necesites hasta que la crema quede a tu gusto.
¿Vamos con los ingredientes?
Bechamel vegana de cobertura
Preparación
10 min
Ingredientes
- 70 ml de aceite de oliva virgen extra
- 30 gr de cebolla
- 70 gr de harina
- 400-600 ml de leche vegetal, al gusto
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Nuez moscada al gusto
Método
Calienta el aceite en un cazo antiadherente. Pica muy finamente la cebolla y sofríela en el aceite unos minutos a fuego lento para que no se queme. Cuando la cebolla esté traslúcida, añade la harina tamizada, sube un poco el fuego y remueve con una cuchara de madera para que se tueste un poco la harina.
Ahora añade la leche vegetal poco a poco mientras vas removiendo con unas varillas.
Sigue removiendo durante unos minutos hasta que quede con el espesor que deseas. Puedes batirla con la batidora si ves que te quedan grumos o para mezclar bien todos los ingredientes.
Añade la sal, la pimienta y la nuez moscada. Mezcla bien.
¡Listo!