Leche de anacardos
Cuando probé esta leche vegana de anacardos, lo primero que pensé, fue que no tenía sentido seguir comprando leche, cuando hacerla era tan sencillo y tan económico.
La verdad es que aunque los anacardos no son baratos, la cantidad que se necesita es pequeña en comparación con la cantidad de leche que nos da, ya que con unos 120 gr. de anacardos, hemos conseguido 1.2 litros de leche. Así que como la relación calidad-precio es indiscutible, sin pensármelo 2 veces me he puesto manos a la obra para preparar esta estupenda y maravillosa leche. Cuando la haces por primera vez, es como magia, y más sabiendo que solo lleva 2 ingredientes: anacardos y agua.
Puedes agregarle un poquito de vainilla si te gusta, pero no es imprescindible. Cuando pruebes esta leche, no vas a querer comprar más leche del súper. Además se prepara en 5 minutos o incluso menos. Vamos, que es ¡como un sueño hecho realidad!
Lo único que necesitas para preparar esta receta es un procesador o batidoraque tenga gran velocidad, para asegurarte de que los anacardos se licúan correctamente y no quedan trocitos. Y ya tienes una leche deliciosa, sana y nutritiva para el café, el chocolate, postres, comidas y todos lo que solías hacer con tu leche vegetal.
Además, el sabor es muy agradable, y como digo, a nosotros ¡nos ha dejado encantados! Así que cuando quieras adentrarte en el mundo de las leches vegetales, no dejes de probar nuestra receta de leche de anacardos. Te va a encantar y es tan fácil y rápido.
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Seguimos caminando juntos hacia un mundo sin sufrimiento animal, y entre todos, podemos conseguirlo.
¿Vamos con los ingredientes?
Leche de anacardos
Preparación
20 min
Porciones
1200 ml
Ingredientes
- 120 gr. de anacardos
- 1200 ml. de agua mineral
- 1 cucharadita de esencia natural de vainilla (opcional)
Método
Pon los anacardos en remojo en agua muy caliente durante al menos 20 minutos.
Cuando haya pasado el tiempo, tira el agua, enjuágalos e introdúcelos en el procesador o la batidora junto con el agua y la vainilla.
Bate a gran velocidad hasta que los ingredientes se integren bien y se forme una leche espumosa.
Consume inmediatamente o conserva un par de días en la nevera en una jarra o botella hermética.
¡Listo!